Habitación moderna y limpia

Cama súper cómoda. Baño moderno y limpio.- Vistas a la calle y a la Torre Eiffel.- Atención impecable

Había un climatizador, un secador de pelo y un hervidor de agua en la habitación, me ha gustado mogollón todo. El hotel tenía una ubicación céntrica muy, pero que muy cerca del centro de la ciudad y también de muchos restaurantes. El distrito Place d'Italie - 13º valía la pena visitarlo.

Queda cerca de la estación de Austerlitz y cerca del metro. Está en un barrio muy tranquilo. El personal del hotel ha sido muy agradable y la habitación amplia y confortable.

El hotel cuenta con una ubicación clave, a solo unos metros del metro, lo que facilita la movilidad en la ciudad. Además, las habitaciones son luminosas y confortables, con vistas a la torre Eiffel en algunas de ellas. Esto sin duda añade un toque especial a la experiencia. Otro aspecto destacable es la relación calidad-precio, que resulta muy buena y hace de este hotel una excelente opción para hospedarse en la ciudad.

Una de las cosas que no me gustó es que la vista de mi habitación daba a una calle pequeña, me hubiera encantado tener una vista hacia algún punto de interés, como la torre Eiffel. Sin embargo, no puedo asegurar si desde el otro lado se puede ver.

El personal era profesional. Me ha encantado mi habitación muy bonita. Mi habitación incluía un climatizador, una terraza y una chimenea. El desayuno era de excelente calidad, había una buena cantidad de comida buena. Los servicios eran excelentes. El hotel tenía WiFi gratis en toda la propiedad, y también ofrecía un parking privado. Ubicación: el hotel estaba al lado del centro de la ciudad, de muchos restaurantes y bares y también de la estación de metro. Además, estaba en un barrio tranquilo.

La ubicación es muy buena, el servicio es de lo mejor, lindo hotel, limpio y nos tocó una vista muy buena de la ciudad.

Para mi gusto la habitación era un poco pequeña, creo que un poco más de espacio sería bueno pero no demerita para nada lo bueno del hotel.

un servicio muy bueno. dormitorio bonito, cama súper cómoda y baño lujoso. ubicación ideal: está al lado de la estación de metro.

La cama muy cómoda, excelente descanso. El desayuno muy completo y muy buena atención y predisposición del personal. La ubicación es buena, no está en pleno barrio latino pero se llega fácil a todos lados.

El ascensor muy chico, solo entra una persona con una valija mediana. Y se quemó una lámpara del baño y tardaron un día en cambiarla.

La limpieza y las instalaciones del hotel son impecables. El desayuno es completo y el personal es muy amable y servicial. Además, este hotel está en un hermoso barrio y cerca de varias estaciones de metro, lo cual facilita el transporte.

Ninguna queja.

Los cruasanes del desayuno y la atención del personal del mismo

Habitación pequeña sin armario,en su lugar un módulo pequeño de estantes y una cortina cerrando,aseo muy pequeño con sólo ducha,a su favor, la limpieza.

la ubicación es muy buena, la zona tranquila y el personal correcto.

El hotel es muy limpio con servicios cómodos. El personal es acogedor y educado. - Habitaciones compactas y ordenadas con una bañera. - Vistas increíbles. - Desayuno de muy alta calidad. - Diseño maravilloso. - Ofrecen un servicio excepcional.

Check-in sin problemas.

La atención del personal de recepción fue excelente, siempre dispuestos a ayudar y brindar información. Además, la limpieza del hotel era impecable, tanto en las habitaciones como en las áreas comunes. Otra ventaja fue la conexión wifi, que funcionaba muy bien y nos permitió estar conectados en todo momento.

El tamaño de las habitaciones dejaba mucho que desear, eran bastante pequeñas y a veces resultaban incómodas. Además, no contaba con ascensor, lo cual era un inconveniente, especialmente para las personas mayores.

Mi estancia en este hotel fue realmente agradable. La habitación era moderna y estaba impecablemente limpia. La cama era increíblemente cómoda y dormí como un bebé todas las noches. Además, el baño también era moderno y muy limpio. Pero lo mejor de todo, las vistas desde mi habitación eran espectaculares. Podía ver la calle y, lo más emocionante, ¡la Torre Eiffel! Me encantaba contemplar las vistas todas las mañanas y todas las noches. Sin duda, esto añadió un toque especial a mi estancia.

La única cosa negativa que puedo mencionar sobre este hotel es que no había ascensor y mi habitación estaba en el sexto piso. Subir y bajar las escaleras todos los días fue bastante agotador, especialmente para personas mayores.

La ubicación de este hotel es excelente, ya que está cerca de varias estaciones de metro, lo que hace que sea muy fácil moverse por la ciudad. Además, esta zona cuenta con una gran cantidad de medios de transporte, lo que facilita aún más la exploración de la ciudad. me impresionó la limpieza del hotel, tanto en la habitación como en las instalaciones comunes. El desayuno ofrecido en el hotel era variado y de alta calidad, con opciones deliciosas. Por último, el personal del hotel fue extremadamente amable y servicial, siempre dispuestos a ayudar con cualquier solicitud o consulta que tuviera.

Nada, todo excelente. No tengo ninguna queja sobre mi estancia en este hotel.